Todos sabemos de la gran competencia que tiene la Liga BBVA y, por mucho que desde fuera del ámbito futbolístico español quieran compararla con una liga de segundo nivel debido a la supuesta escasa competencia que hay en comparación con la liga inglesa, los aficionados españoles al fútbol sabemos de la gran cantidad de estrellas y promesas que nuestro fútbol saca a la luz día tras día.
Esta competencia exhausta en la que se ha convertido la Liga, esta batalla espartana de la que lógicamente se excluyen Madrid y Barcelona (por presupuesto económico, contratos televisivos y otras causas) ha hecho que el Sevilla Fútbol Club, esta temporada, se haya sumergido en una pequeña crisis deportiva que le ha costado la cabeza a Antonio Álvarez siendo su sustituto el alabado 'profesor' Gregorio Manzano.
El conjunto hispalense pareció arancar bien la nueva etapa con Manzano en el banquillo a pesar de que el estreno del entrenador jienense se saldará con derrota en Gijón. La afición parecía volver a sonreir, a disfrutar y lo más importante a soñar. Pero no todo es tan bonito como se pinta y tras dos meses desde que el 'profesor' llegará a tierra rojiblanca, el Sevilla no obtiene resultados beneficiosos para conseguir su principal objetivo: La Champions.
El problema de esta falta de juego se le ha ido echando a los entrenadores que han ido llegando al banquillo tal y como se ha comprobado pero el equipo sigue sin mejorar y empieza a haber más de uno entre la parroquia sevillista que culpa más a la directiva. Es por ello, que se están intentando guardar las espaldas a toda costa en este mercado invernal por medio de fichajes, o al menos esos son los rumores de los medios de comunicación, que no hacen más que complementar la plantilla en lugar de apuntalarla.
Existe una diferencia entre apuntalar y complementar un equipo. El equipo complementado es aquél cuyos con dos jugadores por puesto o cuyos jugadores pueden jugar en varias zonas sin descender su rendimiento,cosa que, el Sevilla, no tiene en estos momentos pues le falta apuntalar la plantilla con un medio creativo algo que aun no han encontrado y dudo que sí encuentren consigan.
Es por ello que, desde este reducido espacio del mundo cibernético, pido que en el mercado invernal el Sevilla fiche pero no Gagos (sin desmerecer la clase de este jugador) que son de corte defensivo y apueste más por jugadores tipo Javier Marquez o Ander Herrera que son jóvenes promesas del fútbol recluidos en clubes pequeños y cuyo precio no será tan alto como otros jóvenes mediocentros de su talla como por ejemplo, Afellay.
Por tanto, se presenta el mes de enero más difícil de los últimos años para la directiva que tanto nos ha dado, que tan grandes nos ha hecho pero que no debe olvidar que la afición si de algo vive es de sueños como el de hace cuatro años en Eindhoven y para ello se debe de fichar en enero no para callar a los que siempre animan sino para hacer estallar cada partido el estadio, hacerlo reventar de cánticos y, por supuesto, para volver a ser lo que hemos sido, somos y seremos el mejor equipo de Andalucía.
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